La hipotermia inducida durante las primeras horas de vida del recién nacido es un tratamiento eficaz para reducir la mortalidad y secuelas graves en neonatos que han sufrido un episodio de hipoxia perinatal. Este procedimiento requiere una asistencia universalizada independiente del centro donde haya nacido, siendo necesario su traslado al hospital de referencia.
Un estudio ha evaluado la eficacia del traslado interhospitalario del neonato con encefalopatía hipóxico-isquémica en hipotermia pasiva. Se trata de un estudio descriptivo con carácter retrospectivo que incluyó una muestra de 46 neonatos: 33 de ellos (71,74%) precisaron traslado por el Servicio de Traslados de Pacientes Críticos (grupo TPC); el resto (28,26%) nació en el centro de referencia. Ambos grupos eran comparables en edad gestacional al nacimiento, sexo, peso y grado de encefalopatía hipóxico-isquémica. Se analizaron variables relacionadas con la aplicación de la hipotermia, y en el grupo TPC se analizaron variables relacionadas con el traslado. No se apreciaron diferencias significativas entre los grupos en la efectividad-consecuencia de la terapia neuroprotectora con hipotermia al alta hospitalaria (p = 0,159) y no se encontraron complicaciones derivadas del traslado interhospitalario.
Según los autores, el traslado interhospitalario del neonato en hipotermia terapéutica realizado de forma pasiva es efectivo, seguro y necesario para el cumplimiento de la terapia. Es preciso consensuar la asistencia con el servicio de referencia, estableciendo guías en cuanto al soporte y rango de temperatura adecuados.
Palabras clavehipotermia inducidaHipoxia-isquemia CategoriasNeuropediatría