La derivación lumboperitoneal con catéter de baja presión de Spetzler y en régimen ambulatorio para el tratamiento de la hidrocefalia crónica del adulto, es el método preferido por los pacientes y familiares del enfermo, frente al de derivación ventriculoperitoneal. En este ultimo método las complicaciones muestran una mayor gravedad al invadir el cerebro y ante la necesidad de anestesia general e ingreso más prolongado.
El procedimiento de la derivación lumboperitoneal es cómodo, con el se consigue acortar el tiempo en lista de espera y el paciente no llega a estar ingresado más de 24 horas de tiempo total. Se trata de un método seguro, en el que las complicaciones son pocas y de poca importancia.
El sistema se puede revisar con una simple radiografía o una incisión cutánea y existen, además, accesorios para interponer en el sistema en caso de bloqueo o hiperdrenaje, gracias al pequeño calibre del sistema, la válvula de rendija de apertura distal y la escasa diferencia de altura entre la toma de entrada y la de salida. Además, cabe destacar que desde el punto de vista económico es más barato que los otros métodos alternativos.
Palabras clavedemendiaDerivación lumboperitonealHidrocefaliaHidrocefalia crónica del adultoSíndrome de Hakim-AdamsTratamiento ambulatorio CategoriasDemencia